La Atlantida

Por: Elías Marín

Primera Parte

Todavía hoy se especula sobre la existencia de fabulosas ciudades sumergidas a lo largo de las costas yen aguas de todo el mundo y la historia de la Atlántida, campeona indiscutida del misterio de los mundos sumergidos. La crónica narrada por primera vez por el filosofo griego platón, tiene ya mas de 2 mil años. Sin embargo a cada paso vienen sumarse nuevo libros a los mas de 2 mil impresos sobre el tema, y equipos de arqueólogos pretenden haber descubierto pruebas de su existencia a ambos lados del atlántico y en el mediterráneo. La mitología celta abundaba en historia de tierras hundidas. Según una de sus tradiciones la estrecha faja del océano atlántico. El relato afirma que en algún momento del siglo V el océano invadió repentinamente estas tierras y solo un hombre llamado trevilian, logro salvarse y pudo contar lo sucedido. De la Atland, isla-reino prehistórica supuestamente hundida en el mar del norte, no hay siquiera tal tradición y mucho mesón pruebas arqueológicas. La única fuente de la historia de la Atland es un manuscrito en frison – antigua lengua germánica-, que se dice descubierto en Holanda en 1971. el manuscrito habla de una sociedad altamente civilizada que vivía en una gran masa de tierra semicircular situada al noroeste de las islas británicas. Según ese texto, una catástrofe cósmica no explicada destruyo totalmente Atland en el año 2193 a.C.

Las tierras perdidas han sido también blanco del oportunismo de los teóricos de las ciencias ocultas y los que presumen de un saber especial. Por ejemplo, se supone que Helena Blavatshy, la pintoresca fundadora de la Teosofía, debía su saber sobre la creación, la evolución y todo concerniente a Lemuria al libro “Libro de Dzyan”, obra que sobrevivió a la destrucción de la Atlántida. Según esa señora los habitantes de Lemuria, grandes criaturas rojas, ovíparas y con 4 brazos, 3 ojos, ningún intelecto y facultades psíquicas bien desarrolladas, fueron los antepasados tanto de los talantes como de las razas humanas. Otro ocultista James Churchward, pretendía haber tenido noticias de Lemuria o, como él la llamaba, Mu por unas supuestas tablillas de Naacal encontradas en un monasterio de la India. Esas especulaciones, algunas bien intencionadas, otras descabelladas, llegaron a mezclarse a modo incidental, y la gente empezó a dar el nombre de Lemuria a un supuesto continente perdido en el pacifico.

No deja de ser impresionante que la primera mención conocida del continente perdido aparezca en una de las obras cumbre de la filosofía occidental: los diálogos de Platón.

La historia narra en 2 de los últimos diálogos compuestos en torno al año 350 a.C. El primero, el Timeo, es la minuta de una conversación que se supone tuvo lugar en Atenas en 421 a.C. entre el filosofo Sócrates y 3 de sus discípulos. En el curso de la discusión, uno de estos, Critias, relata a los otros una historia que a su abuelo le había contado Solon , famoso poeta, político, legislador ateniense. Al parecer, durante una visita de Egipto, Solon conoció en la ciudad de Sais a un sacerdote que le dijo que las crónicas egipcias contenían el relato de una gran guerra liberada en tiempos muy antiguos, en torno al año 9600 a.C., entre Atenas y una poderosa hueste que, partiendo de un lugar lejano del océano Atlántico, avanzaba insolente para atacar a toda Europa, y ah Asia por añadidura. Los invasores según le dijo el sacerdote, procedían de una isla llamada Atlántida, situada mas allá de las columnas de Hércules(el estrecho de gibraltar). Esa isla mayor que Asia menor y África del norte juntas, era el centro de un poderoso imperio que comprendía no solo muchas islas atlánticas vecinas, sino también grandes porciones del continente (Libia hasta Egipto y Europa hasta la toscana). No obstante Grecia, destacaba por su destreza militar, valor y estaba a la cabeza de los helenos. Y cuando la defección de los demás los obligo a resistir sola... derroto a los invasores, salvo de la esclavitud a los que aun no habían sido subyugados y linero generosamente a los demás que habitaban dentro de la columnas. Pero después hubo violentos terremotos y pleamares, y en un día y una noche de desgracia todos... aquellos hombres beliciosos se hundieron como un solo cuerpo en la tierra, y la propia isla de la Atlántida desapareció en las profundidades del mar. Razón por la cual el mar es en esas partes intransitable e impenetrable, pues hay en medio un banco de barro, causado por el hundimiento de la isla. Nada mas nos dice Platón sobre la Atlántida en el Timeo; pero en un dialogo posterior que no llego a terminar, titulado precisamente Critias. Hace que este se ocupe otra vez del tema. En esta ocasión Critias es mas descriptivo y concreto. La Atlántida dice, era una isla de costas escarpadas, pero que iban descendiendo hasta una amplia y fértil llanura central. Abundaban en ella toda clase de minerales, así como caza(incluso elefantes), madera y alimentos vegetales. La antigua metrópoli era una maravilla por sus riquezas y su técnica. En el centro estaban el palacio real y un templo dedicado al dios marino Poseidón, patrono de la Atlántida. El templo estaba ricamente decorado en oro, plata y marfil y un misterioso metal parecido al bronce, el oricalco, que según Critias relucía como el fuego. La isla central estaba rodeada totalmente por un canal circular de 180 metros de anchura, que tenia en torno un circulo de tierra de 360 metros de ancho, y a su vez circundado por un canal de 360 metros, después por otro anillo de tierra de 550 metros y finalmente por un canal de esa misma anchura, en el cabían cómodamente grandes naves. Este anillo múltiple estaba atravesado en uno de sus lados por otra vía de agua que desde el centro llegaba al mar abierto. Critias describe minuciosamente la organización administrativa de la Atlántida, su flota de 1200 naves, algunas de sus ceremonias y los esplendores de su arquitectura. Pero estos detalles eran de menor cuantía. La Atlántida y su pueblo resume, desdeñaban cuanto no fuese la virtud y tenían en poco la prosperidad de que disfrutaban. Por desgracia esta no duro. Por el contrario dice Critias, cuando el elemento divino que había en ellos empezó a debilitarse debido al cruce constante con los mortales y predomino el temperamento humano, no pudieron seguir siendo dignos de su suerte, y empezaron a comportarse de modo indecoroso. Llego un momento en que Zeus rey de los dioses resolvió infligir a la Atlántida un castigo que calmase a sus ambiciones terrenas y la hiciese volver la piedad. Para ello reunió en su muy honorable residencia a todos los dioses, incluso al que esta en el centro del mundo y puede ver cuanto sucede, y una ves que los tuvo allí reunidos les dijo: -Y aquí se interrumpe el dialogo de Platón.

Fuente: Los poderes desconocidos/Selecciones del Readers Digest