03 julio 2007

OVNI tentacular fotografiado en Cocoyoc

Por: Fernando J. Tellez

UFOLOGIA
La mañana del domingo 3 de noviembre de 1973, el matrimonio Jiménez (será llamado así debido a que la familia que tomó las fotos prefirió mantenerse en el anonimato) se encontraba descansando en el balneario de Cocoyoc, en el estado de Morelos; los acompañaba la niñera de su hijo, quien en ese entonces tenía pocos meses de nacido. Habían decidido regresar a la ciudad de México hacia la media tarde, con el fin de evitar los congestionamientos en la carretera. Y así lo hicieron. Apenas habían salido de Cocoyoc -aprox. a las 16:45 pm -, cuando la señora Jiménez vio en el cielo lo que a primera vista le pareció un helicóptero muy extraño.

De inmediato llamó la atención de su esposo y la niñera, para que también lo vieran, ya que a medida que el aparato se acercaba, menos se parecía a una nave conocida.
Sin dudarlo, el señor Jiménez detuvo su auto para observar qué era aquello. Tres años después, contaría:


"Detuve el coche, me bajé y vi un objeto realmente extraño, en forma de pera, pero con su vértice hacia abajo; y alrededor le colgaban unos tentáculos (cinco en total). El objeto se detuvo a unos cien metros de altitud, aunque no me considero bueno para calcular distancias. Daba la impresión de que nos estaba observando. Para esto, mi esposa y la niñera ya se encontraban afuera del coche y estaban viéndolo, al igual que yo. Creo que el estado emocional de todos era entre miedo y curiosidad, lo cual provocó que mi mujer insistiera en que nos fuéramos de allí; yo, mientras tanto, le pedía mi cámara fotográfica y ella me contestó gritando que estaba en la parte posterior de la camioneta, pero que lo olvidara y nos fuéramos.
Fui por la cámara y tomé una primera fotografía; pero entonces el objeto comenzó a alejarse. Cambié el lente normal por un telefoto y tomé dos fotografías más. Debo hacer notar que parecía que los tentáculos le servían como medio de locomoción en el aire como si nadase, ya que los proyectaba en el sentido opuesto al cual se dirigía. Cuando observábamos que se alejaba, vimos a lo lejos un segundo objeto con las mismas características del primero; se encontraba volando al ras de las copas de una hilera de árboles, y desapareció entre la maleza. Después volvimos a ver el primer objeto que había fotografiado, y observamos que iba a aterrizar, proyectando los tentáculos esta vez como patas de aterrizaje.
Atrás de nosotros había un puente donde dos niños campesinos observaban este impresionante espectáculo. Y recuerdo muy bien que uno corrió hacia el objeto, que estaba a unos 200 ó 300 metros del automóvil y posado junto a un árbol. Aunque la maleza se encontraba entre el objeto y nosotros, podíamos verlo perfectamente. Me quedé unos segundos más, para ver si alguien salía, pero a esas alturas estábamos muy asustados; me subí al coche y salimos a toda prisa".

En el relato no se encontraron contradicciones, pues éste coincidía con el de la Sra. Jiménez y la niñera.
"Era una bola con picos a los lados" recuerda la niñera. "El señor nos preguntaba que dónde estaba la cámara, y la señora gritaba que nos metiéramos al coche y nos fuéramos".

Probablemente una de los puntos más peculiares del caso Cocoyoc sean las características físicas del objeto, muy poco comunes en el grueso de la casuística.
El ovnílogo mexicano Fernando Téllez mandó a analizar las fotografías a Kodak Mexicana S.A. Los resultados fueron los siguientes, según palabras de Roberto Padilla, director de servicios especiales de Kodak Mexicana:


"Estos negativos son completamente auténticos. La cámara que se utilizó para tomar estas fotos fue una Minolta SRT 101. La primera foto fue tomada con un lente normal de 50 mm y las fotos dos y tres fueron tomadas con un telefoto de 135 mm, con película Kodacolor 80 ASA 20 Din".
"La secuencia del rollo es lógica; el defecto de la cortina es continuo; el hecho de que las fotos 2 y 3 sean más claras se debe a que, al cambiar la lente por un telefoto, se abrió un paso más de diafragma para dejar entrar más luz.
Mi conclusión es que estos negativos son auténticos; no han sido trucados. Las fotografías son verdaderas y honestas. Yo les doy un 98% de posibilidades de que son verídicas".

El de Cocoyoc es un caso muy especial. Las tomas son reales y muestran un aparato que no aparenta ser nada conocido. Estamos, entonces, frente a una prueba concreta de la existencia de objetos que nos son extraños. Para desgracia de un estudio más acabado de este caso, que aún permanece como no identificado, se ha perdido todo contacto con los testigos, por lo que se ha hecho imposible un análisis profundo de las imágenes.

Este caso salió publicado por vez primera en el número 11 de la revista "Contactos Extraterrestres" en un artículo del ufólogo Fernando Téllez titulado "Ovni tentacular fotografiado en Cocoyoc

1 comentario:

Anónimo dijo...

en "The history channel" hay un programa que se llama "Cazadores de ovnis" en uno de sus capitulos presentaron a una persona que dice haber visto un objeto en forma de ovalo o circular con picos en la parte de atras, dice que el objeto era inmenso y que brillaba (pues era casi de noche), y hubieron otros 2 o 3 sujetos mas con el que coroboraron su historia, el describia al objeto segun recuerdo de la siguiente manera: "era un objeto de brillante de objeto ovalado, y con picos o puas que salian de la parte de atras", sin embargo a dierencia de las fotos ese objeto no estaba en la forma vertical que lo presenta, sino que estaba acostado, es decir, tenia mas bien la logica de un "avion" en forma de propulsion horizontal que como un "helcoptero" de propulson vertical... es interesante que cuando yo oi la historia por primera ves crei que era una estupides, pero ahora que veo fotografias de un objeto de caracteristicas similares pero de tomadas de dia... por cierto creo, auunque no estoy seguro, que en el mismo programa y el mismo capitulo se hablo acerca de un contacto extraterrestre fisico.